Al trabajar continuamente con la astrología suele ser muy abrumador. Me ha pasado que las personas dicen: “No me pasa nada”. Y en mi mente digo: ¿Pero cómo no te pasa nada? Y la astrología no es solo el: Dime qué me va a pasar, va más allá.
Justo este fin de semana tuvimos la luna llena en Virgo. Durante la semana, procrastiné muchísimo con respecto a la limpieza. Me dio mucha pereza tener la casa en orden, hacer lavadoras, limpiar los platos enseguida, acomodar el baño, sacar el polvo de los muebles, doblar la ropa que ya se había secado, etc, etc, etc. Creo que todos nos agotamos. Al igual que no me daba la cabeza para poder terminar de organizar el escritorio de la PC, o de terminar de hacer asuntos burocráticos. Me dije, Mafe, espera a la Luna Llena en Virgo, sabes que cuando entre la Luna a este signo tan enfocado en el orden, la claridad y la pureza, será más fácil realizar estos quehaceres, y así lo hice. Fui más eficiente y gracias a esto, tuve un pequeño momento libre para sentarme a escribir este blog.
La astrología está hecha de pequeños detalles. Y estudiarla, estudiar los tránsitos, estudiar el momento en donde estoy, me ha ayudado con la ansiedad. Porque cualquiera pensaría que me predispongo por lo que va a pasar y al contrario. Más bien me da mucha tranquilidad.
Este año soy Ascendente de Revolución Solar Libra, es decir mi manera de ver al mundo estará impregnada de las características de este signo. A penas ha pasado un mes de mi Revolución Solar y empiezo ya a sentir esta energía. Las salidas, los encuentros, las llamadas, las reuniones. El no querer discutir sino buscar un equilibrio en el entorno. El encontrar ese balance en mi. Mi vida social ha comenzado a activarse nuevamente después de tener unos años muy difíciles a nivel personal.
Este año tengo un stellium en la casa 3. Todo tipo de comunicación se ve favorecido y beneficiado. Hay un incremento masivo de actividades que estén asociadas a hablar, comunicarme, escribir, escuchar, moverme, aprender algo nuevo, nuevos lenguajes y de más. Y miren acá, quizás este texto no lo leerá nadie o lo leerá una sola persona. Pero hoy, que cierro un fin de semana maravilloso, en donde más a gusto conmigo y con mi entorno no me he podido sentir, escribo una entrada más personal. Esto no hubiese pasado nunca antes. (De seguro en el Recap de mi Revolución este será un highlight! Decir que escribí un post largo)
Este fin, de “excesos” porque tuvimos la cuadratura Venus en Acuario con Júpiter en Tauro. La cuadratura se daba justo entre mi casa 1 y 4. Se que hay cosas bastante privadas que también se vieron favorecidas por este tránsito y que no están directamente relacionadas conmigo, pero si se dieron y eso también me dice: Está bien lo que está pasando.El exceso que tuve, podría llamarlo un exceso de mucha actividad física. Desde hace dos semanas he estado muy constante con el ejercicio.
Y a veces me pregunto: ¿Qué fue lo que cambió? Habrá sido la salida finalmente de Saturno por mi casa 1. Yo era una persona muy activa. Hacía ejercicio prácticamente todos los días. Iba al ginmasio, salía, corría al menos 7km al día, comía muy pero muy sano. Y los últimos años fueron un calvario. A nivel mental no entendía como me costaba moverme, los dolores corporales eran tan fuertes que si no era un lado, era el otro. La rodilla, el tobillo, la cadera, la espalda. Lo escribo, y me río. Porque digo: Mafe pero ¡cómo no va a ser eso una de las manifestaciones de Saturno de tránsito en la casa 1! Y justo salió esta semana de la casa 1. Por bien. Porque no volverá hasta en los próximos 30 años.
Se me combinó esa salida, con el stellium en el grado 0 de Acuario (Según mi hora de nacimiento soy Ascendente Acuario en el grado 0 también) con Marte, Venus y Plutón allí. Yo lo siento como: ¡Venga! Una nueva vida. Esta semana trabajé muchísimo y realmente estaba agotada. Sobre todo porque estoy haciendo un trabajo tras bastidores. Ustedes solo ven el día de las consultas o alguna publicación que se monte en redes sociales, pero para mantener la pagina web y otros temas, eso toma mucho tiempo que no se muestra. Y estaba a punto de no salir.
Sabía que Marte y Venus están en conjunción dije: ¡Vamos a hacer que me pasen cosas! Y le dije que sí a cada invitación y fue la mejor decisión que tomé. Cada salida fue tan grata, tan nutritiva. Qué hermoso es conversar con personas que te aconsejan, te comparten tips, que aprendes de ellos y ellos de ti, de todos. Las conversaciones y encuentros fueron tan amenos y tan llenos de: ¡Si hay esperanza, si se puede!. Hasta se celebraron los logros de amigos, de los cambios y los riesgos que tomaron y qué lindo ver el apoyo de todos. Y todas estas experiencias las tuve porque dije: Quiero que me pasen cosas, vamos a salir.
Quizás el escribir publicaciones tan largas está “fuera de moda”. Pero no quiero convertirme en una máquina de solo 1 minuto y medio, con los gachos de Instagram, de Tik Tok, etc. A veces pienso, ¿Cómo es posible que Acuario sea el signo del futuro, de las tendencias pero al mismo tiempo de la rebeldía? Será porque estar en desacuerdo con algo del presente ¿te pone un pie en el futuro? O ¿Esa rebeldía de ir al revés es lo que crea la tendencia en el futuro porque te atreves a hacer algo completamente diferente? No lo sé, pero lo averiguaremos.
A veces pienso: ¿cuáles puedes ser las posibles manifestaciones de Júpiter en Géminis? ¿Cómo será el futuro de la comunicación con Urano en Géminis? Sobre todo con la escritura. Este tema lo desarrollaremos más adelante.
Y bueno, este fin de semana terminó con una salida espontánea de 7km con una amiga, un juguito para merendar después de correr. Visitamos una tienda nueva que abrió de revistas en Milán muy cool. Pasamos 20 minutos allí, no más, y me generó algo en mi, como, qué increíble el arte, el diseño y la parte editorial. Las revistas de todo tipo de tamaño, textura, color, diseño. Luego caminando, recordé que había una tienda de Té. El olor del local divino, calientico y muy cozy. Vimos todas las tazas, las teteras, los diseños. Todo muy hermoso, todo muy espontáneo.
¡Chao, chao!